Capítulo 8 “La Resolución”

Capítulo 8 “La Resolución”: el médico salió para avisar a María y Pedro que Carlos se encontraba recuperándose. Los dos pasaron a verle y le prometieron justicia con las personas que le habían hecho eso. María fue de inmediato al juzgado con la enfermera y ésta consiguió reconocer al detenido como la persona que se encontraba en la escena del crimen del primer asesinato. María tenía una prueba fiable por lo que consiguió detenerle de forma oficial. Al día siguiente, María revisó algunas grabaciones de seguridad de la zona y consiguió dar de nuevo con la cara del acusado. Le subió de nuevo a los juzgados y, después de un interrogatorio muy duro, el acusado terminó confesando todos los asesinatos, desde el hombre de la cabina hasta el de su amigo. María ordenó que fuese trasladado a prisión a la espera del juicio. El caso 'Última Llamada' había terminado de una forma satisfactoria, ahora María tenía que esperar a que su hijo Carlos se recuperase.

Capítulo 7 “Ingresado”

Capítulo 7 “Ingresado”: Carlos fue a ver a sus amigos y les insultó por lo sucedido. Éstos se enfadaron y le dieron una paliza que le dejaron sin poder levantarse de la acerca. Una persona que pasaba por allí llamó a una ambulancia y se lo llevaron al hospital. María reunió en el juzgado a algunos testigos anteriores de los asesinatos. Ninguno sabía al cien por cien si la persona que tenían detenida era el asesino que vieron. María estaba en un callejón sin salida, justo en ese momento, su marido le llamó por teléfono para avisarle del ingreso de su hijo. A pesar de todo, María dejó al secretario judicial a cargo y se fue al hospital. Mientras esperaban el diagnóstico del médico, una enfermera le agradeció que estuviese llevando el caso de 'Última Llamada'. Era la hermana del primer asesinado, y recuerda que cuando llegó a la escena del crimen un hombre se marchaba de allí con mucha prisa.

Capítulo 6 “Pruebas”

Capítulo 6 “Pruebas”: el hombre le dijo que no tenía ningún miedo y que no iba a confesar ninguno de lo asesinatos. María le aseguró que podía conseguir pruebas para encerrarle. María ordenó que registrasen la casa del acusado. Pedro notaba algo raro a su hijo y decidió preguntarle. Éste le confesó que había perdido la virginidad con una prostituta. Pedro, en lugar de echarle la bronca a su hijo, decidió consolarle ya que notaba que estaba muy arrepentido. Por la tarde, el registro de la casa del acusado no había servido para nada. María decidió buscar alguna otra propiedad del acusado pero no tenía nada a su nombre. María tenía que buscar la forma de demostrar que él era el asesino. Por la noche, Pedro se quedó mal al saber que su mujer no dormiría en casa y se quedaría a trabajar en el juzgado. Carlos se armó de valor y fue a ver a sus amigos para echarles la bronca por lo sucedido.

Capítulo 5 “Virginidad”

Capítulo 5 “Virginidad”: por la noche, María seguía revisando el caso por si se había dejado algún cabo suelto. Su marido quería que fuese a la cama, pero como cada noche ella se quedaba trabajando. Carlos fue a casa de sus amigos para estrenarse. Allí se dio cuenta de que sus amigos habían traído prositutas. Carlos, por no quedar mal delante de sus amigos, acabó acostándose con una de ellas. Al día siguiente, Carlos se despertó con muchas llamadas perdidas de sus padres. Al llegar a casa, mintió a su padre diciéndole que se había quedado estudiando. Carlos se sentía muy mal ya que había perdido la virginidad con una prosituta. Los vigilantes del quisco, consiguieron dar con el hombre y le detuvieron. Cuando le llevaron a los juzgados, María fue directamente a la sala y pudo ver que era la misma persona del intercambio de información de días antes. Éste parecía no tener ningún miedo.

Capítulo 4 “Arrepentimiento”

Capítulo 4 “Arrepentimiento”: el hombre le juró a la jueza que no sabía más. María no le creyó por lo que le dejó en libertad pero sin protección. Pedro se despertó a las tres de la mañana por el sonido del móvil de María. Ésta lo cogió, le informaron de que había aparecido asesinado el hombre al que habían interrogado. Al día siguiente, el caso 'Última Llamada' ya tenía un nuevo cadáver dentro. María se arrepentía de haberle dejado en libertad sin protección ya que podía haberle salvado la vida, pero no era el momento de comerse la cabeza, si no de luchar. Una llamada anónima avisó al juzgado de que habían visto el asesino. Una patrulla fue al lugar de la testigo que les dijo que normalmente pasaba todas las mañanas por el mismo quiosco de prensa. María ordenó que se quedasen en esa zona por si volvía aparecer. Carlos estaba nervioso ya que esa noche había quedado con unos amigos para estrenarse y perder le virginidad.

Capítulo 3 “Trampa”

Capítulo 3 “Trampa”: todo el juzgado intentó bajar pero las llamas eran demasiado fuertes. Momentos después, el cuerpo de bomberos informó de que la causa había sido una bomba en el coche de María. El hombre detenido tenía razón: todo había sido una trampa. María había tenido delante de ella al asesino y no había hecho nada. El hombre fue llevado a los calabozos hasta que María supiese qué hacer con él, ya que igual podía tener más información. Al día siguiente, María consiguió un retrato robot del hombre que había hablado con ella. Ordenó que se publicase en todos los periódicos como un asesino muy buscado. El asesino vio la foto en los periódicos y descubrió que su “amigo” le había tenido una trampa, por lo que tenía que matarlo. El hombre salió esa tarde del calabozo para hablar con la jueza, que le ofreció protección si le contaba más cosas. 

Capítulo 2 “El hombre”

Capítulo 2 “El hombre”: María decidió organizar un operativo en la zona para que la persona que le había llamado no se fuese sin decirle lo que le tenía que decir. Justo a las siete, María acudió a la zona de reunión y allí había un hombre. Éste le dijo que era un antigüo amigo del asesino, y que sabían quién era. Le dio todos los datos y le avisó que fuera con cuidado. Justo cuando el hombre se fue, María organizó un protocolo de búsqueda para que llevasen a la persona de inmediato a los juzgados. Horas después, el hombre apareció detenido en los juzgados. María comenzó a interrogarle pero parecía como que el hombre sabía de qué iba todo. Le dijo a María que todo había sido una trampa, que su vida estaba en peligro y que la persona que le había citado era el verdadero asesino. En ese momento se escuchó una fuerte explosión en todo el juzgado, provenía del aparcamiento.